sábado, 7 de febrero de 2015




«El profesor ideal para este nuevo siglo tendrá que ser capaz de enseñar la aritmética del corazón y la gramática de las relaciones sociales. Si la escuela y la administración asumen este reto, la convivencia en este milenio puede ser más fácil para todos y nuestro corazón no sufrirá más de lo necesario».

Natalio Extremera y Pablo Fernández-Berrocal (2002:374)

viernes, 6 de febrero de 2015

COMENZAMOS....

NUESTRO PUNTO DE PARTIDA....

       

El sistema educativo, se encuentra inmerso en un proceso de cambios enmarcados en el conjunto de transformaciones sociales propiciadas por la innovación tecnológica y, sobre todo, por el desarrollo de las tecnologías de la información y de la comunicación, por los grandes cambios que se producen en las relaciones sociales, y por una nueva concepción de las relaciones tecnología-sociedad que determinan las relaciones tecnología-educación.


Aunque el énfasis de los cambios educativos, lógicamente, está puesto en el impacto que la tecnología está produciendo en nuestras vidas, no debemos olvidarnos de la importancia de la educación de las emociones y los sentimientos.

Cuando intentamos describir los diferentes escenarios de la vida escolar que se produce en nuestro centro, “contamos la película” (unas veces dramática, otras veces comedia, pero casi todas de acción) de lo que se espera de un lugar de estas características. Un film con no muchos actores, con un guión abierto en el que todo está por suceder, con muchos técnicos revisando constantemente y la claqueta del director preparada para “acción”, y como no, “corten”.

Un rodaje en directo. Sin ensayos de los actores principales (los docentes y los alumnos). Donde los Productores (la comunidad educativa), intentan modificar cada toma que sale mal, sin valorar las consecuencias sobre los personajes.

Este proyecto pretende cambiar el set de rodaje intentando que se produzca un cambio en los escenarios, a través del conocimiento profundo de los personajes (conocimiento del yo) y de su desarrollo personal (inteligencia emocional).

Es parte de una experiencia formativa que hemos organizado con mucha ilusión para nuestros alumnos/as. Actualmente se encuentran en un proceso vital y social muy delicado de sus vidas y requieren crecer emocionalmente. Fue creado para que cada uno de ellos tenga la oportunidad de sentir, vivir, reconstruir y descubrir desde sus distintas aplicaciones, la riqueza de sus propias emociones, adquirir conocimientos acerca de la inteligencia emocional y desarrollar sus propias habilidades emocionales.
Pretendemos que esta propuesta sea útil para ayudarlos a profundizar en el autoconocimiento, y en el que se considera el desarrollo emocional como un proceso auto-constructivo, que se logra a través de la implicación del propio estudiante; en ese sentido, nuestro papel es promover las mejores oportunidades y condiciones para que cada uno de los alumnos/as construya su propio conocimiento y se eleve a la condición de protagonista de su proceso de formación, teniendo también como norte su futura salud emocional y la calidad de las relaciones que modelarán y promoverán como personas.


Publicado por Rosa Hernando Salinas y Agustín Obispo Perea


jueves, 5 de febrero de 2015

ASÍ LO HACEMOS....

Metodología 

                             
Para conseguir nuestro objetivo principal, debemos poner en práctica una metodología vivencial y participativa, donde se crea un espacio de reflexión y de conocimiento de las áreas que cada alumno deberá “trabajar” en sí mismo para alcanzar sus objetivos dentro del marco de la escuela. Pero para que sean eficaces deben tener en cuenta algunas pautas:
  • Deben darse en un clima de confianza, apertura y sinceridad.
  • Han de seguir una metodología vivencial, utilizando métodos, juegos y experiencias que faciliten la conexión con la realidad individual.
  • Han de propiciar la introspección, la reflexión y la toma de conciencia.
  • Han de conectar con las emociones y la motivación de cada alumno.
Por otro lado, es aconsejable que se realice con carácter interdisciplinar, trabajando desde las diferentes áreas, y teniendo como referente principal el autoconocimiento. De esta manera rompemos con los esquemas tradicionales, favorecemos la concentración y la cohesión grupal.  Esto permite un mayor clima de confianza y apertura, además, son muy bien acogidos por los alumnos.

           Hemos tenido en cuenta las competencias básicas especialmente la competencia de aprender a aprender, ya que consideramos que esta es fundamental para la adquisición de futuros conocimientos y  es la base de la meta-cognición, fin último al que orientamos nuestros aprendizajes. 



Publicado por Rosa Hernando Salinas y Agustín Obispo Perea